29/11/2011

..el paraje de las sombras..


        Soñé que mis amigos se perdían, que el transcurso de los días acababa por ahogarme, que un reloj en mi contra me vencía, situándome en el filo de una negra llanura.

Y soñé que la vida no era más que una sucesión de penas, como liebre a la carrera tuve que huir de mi particular condena, una desdicha perenne que tibia y venenosa paseaba por mis venas.

Y soñé que mi sueño dejaba paso a la agonía, una espada de Damocles sempiterna sobre mí, una navaja oxidada acariciándome, tan despacio que ansiaba contemplar mi fin, tan desquiciante que estuve tentado de vencerme a su muerte sutil…

Y soñé que despertaba, rodeado de tinieblas, sin poder tensar mis músculos para lograr esquivarlas… Tan cerca de mi muerte, sin poder saborearla.

        Y aún hoy me pregunto si fue sueño o realidad, si el paraje de las sombras no era más que una verdad, si de él se puede escapar, a base de voluntad, o si por el contrario en él siempre he vivido, tan cerca y a la vez tan lejos de mis amigos, entre el fuego inagotable de la condenada vida, sofocado por el ruido de mi propia muerte, con un reloj agobiante que se me posa delante cada vez que suspiro… Y cada vez que te miro.

        Si vas a matarme tómate tu tiempo, pues una vida contigo será mi cuenta atrás, pero mi vida sin ti no es más que un sueño lúgubre del que no logro despertar.

23/11/2011

..hermanos..

..por esos hermanos que oyen llover
en una noche oscura vacía de estrellas
repleta tal vez de inestables veletas
que en silencio al viento se dejan mecer

por esos hermanos que ven el placer
en esas frías gotas que buscan su piel
que despacio van calmando su sed
les mojan sin prisa por ver amanecer

por esos hermanos que saben que ayer
aun sin conocerse se iban a conocer
saben que hoy día todo pueden vencer
y saben que juntos van a envejecer..

13/11/2011

..mi historia..

“aves carroñeras” sobre una “dulce marea”
“grises figuras” “de “danza prohibida”
“no llores”, no son más que “sueños negros”
“desde el espejo” “donde vive la mentira”

y “que llueva” “tras la ventana”
o “entre mis huesos de alambre”
susurra “tu nombre” “a la luna”
o “déjame que te hable”
“infinita” como el “mar en calma”
o en “semillas” de “ocho versos”
en “un sueño” fuiste “humo”
sobre “infinitos recuerdos”

..y sonreiré “mientras esté latiendo”
en “el final del libro” “con las manos vacías”
viviré “desnudo” “a las estrellas”
te diré “adiós” bajo “nuestra melodía”..


--nota: formado por títulos de otros escritos, marcados con comillas

12/11/2011

..brevedad..

días de buscar aliento en la soledad
de dejar pasar las horas en su orilla
existimos con la misma brevedad
que el calor del arder de una cerilla

y me siento a contemplar el vacío
a mi lado ya no está quien fue mi amigo
pienso por qué tendré tanto frío
si de nuestra amistad hice yo mi abrigo

..revivo aquellos ratos de felicidad
recordando junto a su gris tumba
sé que me perderé en la oscuridad
porque él ya no me alumbra..

09/11/2011

..un sueño..

        Comienzo a confundir sueño con realidad, pues no paro de soñar, ni despierto ni dormido.

        Y es que hasta en mis sueños escribo, como un gato cuando duerme, siempre atento a cualquier ruido. Me dejo llevar por la noche de mis párpados, y le pongo puertas al mar para en él poder nadar, tranquilo. Las palabras aprenden a volar, el aire tintinea con mis frases, decapita mis pesares y reluce sobre mi caminar. Mientras, el hielo se deshace sobre un vaso de lágrimas, que se beben a sí mismas para luego renacer de su propia sal, en un ciclo sin principio claro y todavía sin final.

        Veo que alguien ha enjaulado un ave en ese vaso, ¿y cómo sé que yo no he sido? Si esa ave voló conmigo, no la culpo por haber hecho sobre mí su sobrio nido. ¿Será esa ave un alma libre como lo fui yo de niño, que sólo sabe soñar? ¿Podrá escapar del vaso que llena su propio llanto y libre volver a volar?

        En el cielo pintado del color de la soledad es donde busco mi sitio, es a donde acudiré para vagar con levedad. Si es allí donde reposan las dudas, que mis toscas letras no saben espantar, que bajen, que vengan y me expliquen cómo las he de derrotar.  

        Y de golpe abro los ojos, y descubro aún entre dudas, medio perdido, que ese mundo sin gravedad me sigue rodeando, que nunca se ha ido, que por él siempre he vagado, y que de sus brazos nunca escaparé, ni despierto, ni dormido.

01/11/2011

..dulce marea..


        Y me entrego por completo a ella, poco a poco, al igual que las olas se entregan a la arena, en una larga danza de vaivén. Dejo volar mis manos sobre su piel y en ellas vuela toda mi pena, cuando juntos somos uno.

        Ella me contempla, sincera y sin secretos, a escasos centímetros de mi boca. Y me atrae cada vez más, y siento que las horas resbalan sobre mi alma desnuda cuando la tengo aquí, y le digo una y otra vez lo que la quiero, el placer que siento al tenerla junto a mí.

        Mi cuerpo se convulsiona, ella ríe descarada, hasta que al final derramo todo lo que hay en mi interior, sobre su palidez, en una dulce marea donde salpico mis agobios para luego caer exhausto, y yacer durante horas junto a quien he amado en esta noche eterna…

        Eso es lo que siento cuando escribo.

..aves carroñeras..


¿Qué es el suicidio sino la forma más pura del egoísmo?

        Y aquí me encuentro, solo, una vez más, en mi habitación, tejiéndome una ropa con todas mis decepciones, enfados, y algo de hilo bramante. Es justo en estos instantes cuando mi desapego por la vida crece, cuando descubro que el hombre no es nada salvo un engendro, tan empeñado en aplastar a sus semejantes que hace siglos que olvidó su tarea principal; o tal vez nunca la supo.

        Y nadando en la orilla de mi propio autismo, inducido tanto por el exterior como por mí mismo, es cuando decido abandonar. Me dejo subyugar por el odio de aquel monstruo, de extremidades carnosas y sucio corazón, que algún día pensé que era de mi misma especie, por alguna triste razón… y sólo confío en no serlo pues, tarde o temprano, trataría de destruirme.

        Y es en este mismo instante cuando proclamo, agotado y malherido de luchar en esta guerra sin principio y sin final, provocada por el odio contenido de este mundo loco y anormal, que odio al ser humano.

        Pero he de reconocer que soy ave carroñera, como los demás, que me nutro de la muerte… y sí, me tendré que acostumbrar.